Esto empezó como empiezan todas las cosas sin sentido: oye tío, deberíamos...
Y aquí estamos, 2 semanas y 5 horas de trabajo nada productivo después, a las 21:19, tres frikis en una habitación, y con una presentación por escribir.
Somos las tres mentes.
Gepé, la mente inteligente:
Lo de inteligente se lo ha ganado a pulso. Entre sus numerosos títulos académicos destacan: bachillerato internacional de ciencias y alguna que otra asignatura del grado de física que actualmente cursa. Intentó de forma fallida hacerse millonario con su anterior blog, así que espera que al menos este le de el éxito que el destino le negó.
Datos aparte, inteligente no es, pero ya discurre más que las dos mentes que vienen a continuación.
Von Trier, la mente creativa:
Su excepcional gusto por la bohemia y los alucinógenos impidió que acabara la carrera de publicidad, desistió tras un duro día de clase. Actualmente prueba suerte en informática, que al menos tiene internet gratis.
Pese a su daltonismo es el único de las tres mentes que entiende de diseño y droga.
¿Por qué Von Trier? Sólo lo sabe él, bueno, cuando las drogas le permiten recordar algo.
Pitu, la mente operativa:
Nuestro capitán, tras su leve e infructuoso paso por un módulo de informática, decidió que lo suyo era más vaguear e irse de fiesta. Y se alistó en el ejército. Desde su base surfea la web buscando lo más friki entre lo friki, y luego te lo cuenta. Su mente perversa crea textos que hacen llorar a adolescentes en celo, pero se lo tenemos prohibido fuera del tuenti. Es el mayor de los tres y el que menos escrúpulos y estudios tiene, pero sabe lo que se hace.
